El jueves 1 de diciembre, la comunidad carampanguina concurrió a una eucaristía para agradecer a Dios por esta etapa que finalizaron los estudiantes.
La misa, presidida por el padre Héctor Guarda S.J., estuvo marcada por la entrega a cada alumno del símbolo de la cruz de Jesús como el centro de la vida carampanguina.
Los jóvenes también recibieron una bendición final por parte del sacerdote; quienes, posterior a ese momento, le entregaron una carta a sus padres para expresarles el amor y agradecimiento que sienten hacia ellos.
La ceremonia terminó con la premiación de aquellos alumnos que este año se destacaron como: Mejor Compañero, Compromiso con la Pastoral, Excelencia Académica y Espíritu Carampanguino.